En la era antigua, antes de la llegada de Adán y Eva, existían en la tierra religiones bárbaras que incluían en sus ritos para rendir culto a sus dioses, estuprar (deshonrar) a una doncella, sacrificarla y beber de la sangre de la misma. Fueron Adán, Eva y sus descendientes quienes reformaron esta barbarie, sustituyéndolas por el sacrificio de un cordero. Iniciando un proceso de humanización de la conducta de los primitivos de la tierra, legislando. Dieron por primera ves el “amaos los unos a los otros como hijos de un solo y único creador del universo”. Las reformas no se detuvieron y en la época de Noe el cordero y la sangre del cordero fueron sustituidos por bollos de pan y jugo de frutas. Dentro de la religión cristiana apostólica y romana. En un sincretismo que une la barbarie y la ley de amor. Existe la llamada eucaristía en donde se simboliza el consumo de carne humana y la digestión de la sangre de Jesús de Nazareth en un acto figurado de antropofagia (Canibalismo) que semeja a nuestros antepasados primitivos.
Que notorio, no...?
2 comentarios:
da mucho que pensar que los rituales se celebren debajo de la cruz, símbolo de tortura y muerte de Jesús, y que se haya convertido en objeto de adoración me resulta flipante !
un saludo Juancho
c.
Así es Carmen, hay muchas cosas que no cierran, pero que la actitud sacralizante con que se ha investido todo esto no deja ver, y no solo eso sino que además oculta y vela muchas cosas......
Un gran saludo
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